1. El testimonio es una disciplina espiritual que nos llama a compartir nuestras experiencias con Dios con otros. En Proverbios 11:30 (RV60) se nos dice: “El fruto del justo es árbol de vida, y el que gana almas es sabio”. Al compartir nuestro testimonio, estamos siendo instrumentos de Dios para llevar a otros a conocerlo y experimentar su amor y poder.

2. El testimonio nos ayuda a fortalecer nuestra fe y confianza en Dios. En 1 Juan 5:10 (RV60) se nos dice: “El que cree en el Hijo de Dios, tiene el testimonio en sí mismo”. Al compartir nuestro testimonio, recordamos y reafirmamos las bendiciones y milagros que Dios ha hecho en nuestras vidas, lo que nos fortalece en nuestra fe y nos ayuda a confiar en su plan para nosotros.

3. El testimonio es una forma de dar gloria a Dios. En Apocalipsis 12:11 (RV60) se nos dice: “Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos”. Al compartir nuestro testimonio, estamos dando testimonio del poder y la bondad de Dios en nuestras vidas, lo que glorifica su nombre y puede ser una fuente de inspiración y esperanza para otros.