1. La compasión hacia el prójimo es un mandato divino: En Mateo 22:39, Jesús enseña que el segundo mandamiento más importante es “amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Esto implica tener compasión y preocuparse por el bienestar de los demás, así como lo haríamos por nosotros mismos.

2. La compasión es un acto de amor y misericordia: En Efesios 4:32, se nos insta a ser compasivos y perdonarnos unos a otros, así como Dios en Cristo nos perdonó. La compasión hacia el prójimo no solo es un acto de amor, sino también de perdón y misericordia, tal como Dios nos ha mostrado.

3. La compasión produce bendiciones: En Proverbios 19:17 leemos “El que tiene piedad del pobre presta al SEÑOR, y El le recompensará por su buena obra”. Cuando mostramos compasión hacia el prójimo, estamos haciendo una obra que agrada a Dios y Él promete bendecirnos por ello. La compasión también puede traer unidad y paz en nuestras relaciones con los demás.

En resumen, la compasión hacia el prójimo es un mandato divino que demuestra amor, misericordia y puede traer bendiciones a nuestras vidas. Como cristianos, debemos esforzarnos por ser compasivos y mostrar amor hacia nuestro prójimo, tal como Dios lo ha hecho con nosotros.

Recommended Posts