El Evangelio de Mateo es uno de los cuatro evangelios del Nuevo Testamento de la Biblia y narra la vida, muerte y resurrección de Jesucristo. Mateo, también conocido como Leví, era un recaudador de impuestos que dejó su trabajo para seguir a Jesús y se convirtió en uno de sus discípulos.

Este evangelio comienza con la genealogía de Jesús, demostrando así su linaje mesiánico como descendiente del rey David. Luego, narra el nacimiento de Jesús, su ministerio y sus enseñanzas, incluyendo el famoso Sermón del Monte.

Una de las características más importantes del Evangelio de Mateo es su énfasis en la ley y las profecías del Antiguo Testamento, mostrando cómo Jesús cumplió todas las profecías mesiánicas. También destaca la importancia de la fe, la justicia y el amor al prójimo.

El Evangelio de Mateo culmina con la muerte y resurrección de Jesús, demostrando su poder sobre la muerte y su cumplimiento de la voluntad de Dios. Mateo registra las palabras finales de Jesús a sus discípulos antes de ascender al cielo y la Gran Comisión, en la que les ordena predicar el evangelio a todas las naciones.

En resumen, el Evangelio de Mateo es un relato poderoso y fundamental de la vida de Jesús y su mensaje de amor y salvación. Nos desafía a vivir de acuerdo a las enseñanzas de Cristo y a llevar su amor y su luz al mundo. Como se nos recuerda en Mateo 28:19, “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones”.

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