Dios Escucha

“Atento está el Señor a la oración de los justos.” (Salmos 34:15)
Esta verdad nos llena de esperanza y confianza. No importa lo que esté ocurriendo a tu alrededor ni cuán silencioso parezca el cielo, la Palabra asegura que Dios está pendiente de quienes le buscan con sinceridad. El Señor no es indiferente a tu voz ni a tus necesidades. Más bien, está atento, vigilando y escuchando cada oración que surge de un corazón recto.
Orar es mucho más que decir palabras; es abrir el alma delante de Dios. Quizás nadie más comprenda lo que vives, pero Dios sí lo sabe. Él ve tus lágrimas, entiende tus luchas y escucha cada suspiro, incluso aquellos que no puedes expresar con palabras. En los momentos de mayor debilidad, cuando el corazón solo puede clamar en silencio, ahí está Dios, atento, escuchando con amor y compasión.
Esta promesa nos anima a no dejar de orar. Aunque la respuesta se tarde o no sea lo que esperabas, la fe se fortalece cuando reconoces que no estás solo. Dios valora la sinceridad, la humildad y la perseverancia en la oración. Él no solo escucha, sino que actúa conforme a su perfecta voluntad y en su tiempo.
Hoy te invito a confiar y a hablar con Dios como tu Padre. Entrégale tus cargas y deseos. Cree que Él está atento a tu voz y que responderá con fidelidad.
🙏 Oración final:
Señor, gracias porque tus oídos están atentos a mi oración. Aunque otros no me escuchen, Tú siempre estás cerca. Ayúdame a orar con fe y a confiar en tu respuesta. En el nombre de Jesús, amén.