En la vida, a menudo nos encontramos perdidos y confundidos, buscando un propósito y sentido en medio de tantas distracciones y preocupaciones. Sin embargo, la respuesta a todas nuestras inquietudes se encuentra en una sola persona: Dios. Y la buena noticia es que nunca es tarde para volver a Él.

La Biblia nos dice en Jeremías 29:13 “Me buscarán y me encontrarán, cuando me busquen de todo corazón”. Esto significa que si nos acercamos a Dios con sinceridad y humildad, Él siempre estará ahí para nosotros, dispuesto a guiarnos y llenar nuestras vidas de paz y propósito.

No importa cuán lejos nos hayamos alejado de Dios, Él siempre estará esperando por nosotros con brazos abiertos. En Hechos 3:19 se nos insta a “arrepentirnos y convertirnos, para que sean borrados nuestros pecados y vengan tiempos de descanso de parte del Señor”. Dios está dispuesto a perdonarnos y renovarnos si nos volvemos a Él con un corazón contrito.

Así que hoy, te invito a que vuelvas a Dios. Él te ama incondicionalmente y quiere lo mejor para ti. No esperes más, acércate a Él en oración y comienza una relación personal con Él. Verás cómo tu vida se transforma y encuentras verdadera paz y felicidad en su presencia.