Hoy es un día que Dios ha hecho, y es un día hermoso para adorarlo y darle gracias por todo lo que nos ha dado. En la biblia, en el Salmo 118:24, se nos recuerda: “Este es el día que hizo Jehová; nos gozaremos y alegraremos en él”.
Cada día que despertamos y tenemos la oportunidad de respirar, caminar y disfrutar de las pequeñas cosas de la vida, es un regalo de Dios. Y es nuestro deber agradecerle y alabarlo por su amor y bondad.
Adorar a Dios no solo se trata de ir a la iglesia o rezar, sino también de apreciar su creación y de vivir de acuerdo a sus mandamientos. En este día, podemos tomar un momento para contemplar la naturaleza, agradecer por nuestra familia y amigos, y por todas las bendiciones que tenemos en nuestra vida.
Además, en este día podemos recordar las palabras de Jesús en Mateo 18:20: “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. Así que, aunque no podamos reunirnos con nuestra congregación en persona, podemos elevar nuestras voces y corazones a Dios y sentir su presencia en nuestras vidas.
Aprovechemos este hermoso día para adorar a Dios con todo nuestro ser y recordar que su amor y misericordia son infinitos. Que su luz nos guíe y nos dé fuerzas para enfrentar cualquier desafío que se nos presente. ¡Bendito sea el día que Dios ha hecho!