Según la biblia, el propósito de la vida es vivir en comunión con Dios y cumplir su voluntad. En el libro de Eclesiastés 12:13, se nos dice que “temer a Dios y guardar sus mandamientos” es el deber de todo ser humano. Esto implica amar a Dios sobre todas las cosas y seguir sus enseñanzas en nuestras acciones y decisiones.

Además, en Mateo 22:37-40, Jesús resume los mandamientos en dos: amar a Dios con todo nuestro ser y amar al prójimo como a nosotros mismos. Esto nos muestra que el propósito de la vida también incluye amar y servir a los demás, ayudar a los necesitados y hacer el bien en el mundo.

Otro aspecto importante del propósito de la vida en la biblia es la salvación. En Juan 3:16 se nos dice que Dios amó tanto al mundo que dio a su único hijo, Jesús, para que todo aquel que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. Por lo tanto, nuestro propósito también es aceptar a Jesús como nuestro salvador y seguir sus enseñanzas para alcanzar la vida eterna en el reino de Dios.

En resumen, el propósito de la vida según la biblia es vivir en comunión con Dios, amar y servir a los demás y alcanzar la salvación a través de Jesús. Siguiendo estos principios, podemos encontrar verdadero significado y plenitud en nuestra vida terrenal y en la vida eterna.